Ante las condiciones de insalubridad, precariedad y pocos cuidados en las que se encuentran decenas de familias michoacanas en el campamento “El Chaparral” en Tijuana, la Fundación Jurídica Migrante (Fujumi) pidió a través de Ángeles Luna Anguiano la atención de los tres órdenes de gobierno para nuestros paisanos michoacanos.
“Se trata de familias enteras de michoacanos que buscan protección y esperan asilo político de EUA; frente a la crisis de inseguridad que les hizo imposible vivir en sus comunidades en Aguililla, Coalcomán y Tepacaltepec; regiones azotadas por la violencia y los constantes enfrentamientos entre grupos criminales”, dijo la representante de Fujumi.
Ángeles Luna, manifestó que espera que a la brevedad el Gobierno de Michoacán se involucre y establezca una vinculación con las autoridades de Baja California Norte para que se pueda dar una intervención inmediata en esta problemática, más allá de lo que también pueda realizar el Gobierno Federal.
“En este campamento hay niños, mujeres, personas de la tercera edad, que no salieron de su lugar de origen por gusto, es migración forzada ante el riesgo latente de perder la vida, pero no por ello dejan de ser ciudadanos que merecen toda la atención de los ciudadanos”, detalló Luna Anguiano.

Añadió que las condiciones actuales en el Campamento “El Chaparral” son infrahumanas, ya que existe brote de varicela, duermen en carpas improvisadas las cuales les rentan en tres mil pesos, así como en el hacinamiento ha proliferado la prostitución y la drogadicción.
“Debemos actuar rápidamente, es terrible saber que existen seres humanos que carecen de lo básico para la subsistencia, estamos fallando como sociedad, como seres humanos, tenemos un gobierno inoperante, no podemos normalizar esta terrible situación”, indicó la integrante de Fujumi.
Ángeles Luna finalizó diciendo que para obtener asilo se debe de cumplir con requisitos bien acreditados como la personalidad y personería jurídica, un documento expedido por una autoridad donde conste el peligro inminente y además los acuerdos vigentes y operantes para solicitar a dicho país el derecho a ser asilado, siendo la realidad que la mayoría de las solicitudes son rechazadas.