En Michoacán hay que reforzar el proceso de capacitación de maestras y maestros, aseveró Héctor Astudillo García, presidente de la Comisión Ejecutiva de la Sección 18 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), quien se pronunció porque esa capacitación sea presencial y no en línea.
Celebró que el llamado que hicieron a más de 300 profesores que tienen el título de ser directivos desde educación inicial hasta secundaria, hayan respondido al llamado pues “son compañeros que asumen un liderazgo natural en sus centros de trabajo, en sus zonas escolares”.
Externó su confianza en que, con el ejercicio desarrollado, esos mentores adquieran mayores herramientas discursivas y de análisis para el tema de los planes y programas de estudio y libros de texto.
En cuanto a las agendas del Gobernador y la Secretaria de Educación, dijo entender que hay temas importantes que no pueden dejar de lado, sin embargo “celebramos que hayan enviado al encargado del Sistema de Formación Continua de la propia Secretaría”.
Ese enviado, reconoce que en Michoacán hace falta mucho reforzar esa línea de trabajo, es decir lo que tiene que ver con la capacitación a las maestras y maestros que están en las aulas.
Indicó que asumieron el compromiso público de trabajar juntos –Secretaría de Educación, Gobierno del estado y Sindicato- para generar más foros de análisis y que no sean capacitaciones en línea sino presenciales, para que eso permita dotar a los trabajadores de mayores herramientas y su trabajo sea más efectivo.
En torno a la presunta persistencia en la asignación de plazas irregulares, puntualizó que han insistido a las autoridades educativas, tanto de la SEE como de la Uesicamm que el sindicato, como parte del órgano que rige, regula la asignación de plazas, no va a actuar ni en complicidad ni por omisión y cualquier error, cualquier fallo o exceso que detecte el sindicato “lo vamos a denunciar ante las autoridades estatales y federales”. Resaltó que cualquier plaza de docente o directivo que quede libre tienen que asignarse por procesos públicos, en eventos públicos.