ZACÁN, Michoacán.- Sin lugar a dudas que una de las danzas más significativas de esta comunidad, es la de Los Negritos, que se baila el día 25 de diciembre.
Los Negritos, inicia el 25, con el “levantamiento” del Niño Dios, música, confeti y dulces, en casa del carguero, en este caso, Jurhi Valencia; posteriormente, la misa, a la que, obligatoriamente, asisten los danzantes, elegantemente vestidos.

Llevan traje y guantes color negro, una chicota de cuero en la diestra; la máscara labrada de madera y de color negro, en la parte superior un vistoso penacho, de donde penden largos listones de colores que pasan sobre la espalda hasta casi a ras de piso; éstos van sostenidos por una mascada que va cruzada desde el hombro, hasta debajo de la axila del hombro contrario.
Al término de la misa, bailan dentro del templo, luego regresan a casa del carguero, para posteriormente salir a bailar a varias partes del pueblo, donde hay belenes o alguno ha sido carguero.

Así continúan hasta cerca de las tres de la tarde, en que llegan los “correos”, que llevaran dos mensajes escritos; uno para los danzantes, y otro para los músicos. En dicho correo, algo así como una whatsapp, se les invita, por parte de las autoridades establecidas en casa del carguero, a que regresen a comer.
Los correos, vestidos estrafalariamente, algunos con máscaras, como tratando de que no sean reconocidos, han localizado a los danzantes y músico, han entregado el mensaje, han bailado y ahora, de vuelta a casa del carguero, donde serán “encontrados”, con dulces, colaciones y confeti.

Entrarán bailando, una gran rueda de Los Negritos y asistentes, para dar paso a Los Correos, que habrán de bailar lo más horrendo que se pueda. Si alguien osa bailar con alguno de ellos, serán detenidos por la policía que se ha conformado y lo colgarán con un lazo, en un gran arco de madera de encino, como castigo; deberá pagar una multa, consistente en especie.

Luego de la comida, tatemado y kurundas, regularmente ya no salen a danzar, esperan la hora para ir a entregar al niño dios, a casa del nuevo carguero, en este caso, Agustín Oseguera Huanosto y Gaby Méndez Bravo, donde serán recibidos por familiares, en una doble fila de personas que llevarán flores y velas encendidas.