La alternativa es unificar a Michoacán mediante un liderazgo que posibilite recuperar la economía, los empleos y el establecimiento de una ruta económica, hoy rotos por la negligencia que no ha permitido construir un proyecto económico sólido y de largo alcance.
Redacción Gráfica Nacional
El principal problema de Michoacán es de crisis de poder, consideró Juan Antonio Ixtláhuac Orihuela durante una charla con Gráfica Nacional, donde señaló que debido a esa condición “difícilmente podemos pensar en buenas políticas públicas, buenos servicios o resultados exitosos”. Además, el expriísta sostuvo que Michoacán sigue a flote gracias a que provee productos de primera necesidad y a las remesas que envían los michoacanos en Estados Unidos de América, consideradas fuente principal de ingresos al país.
El ex edil de Zitácuaro recordó que, de acuerdo a estadísticas, la mitad de los migrantes son michoacanos, y reiteró que gracias a ellos y un poco al turismo, el estado continúa a flote, aunque debido a la pandemia el sector turístico ha pasado a tercer término.
Para recomponer el estado, Toño Ixtláhuac dijo estar convencido de que debe haber un liderazgo importante para reunificar a Michoacán, pues el estado hoy está parchado, mutilado, dividido y despegado entre sus regiones; no se conectan con Morelia los que viven en La Piedad, Sahuayo y Jiquilpan, “sus habitantes no sienten a la capital del estado”, mucho menos a otras regiones de la entidad.

La gente de esos municipios siente más a Jalisco y a Guanajuato, si vamos al oriente prácticamente es lo mismo, estamos en mayor relación con el Estado de México, si nos vamos a otras latitudes de Michoacán vemos la misma situación.
Apuntó Ixtláhuac Orihuela que la alternativa es unificar a Michoacán para que sea poderoso, si lo logramos será mediante un liderazgo que posibilite recuperar la economía, los empleos y el establecimiento de una ruta económica, hoy rotas por la negligencia que no ha permitido construir un proyecto económico solido y de largo alcance.
Para el exdiputado priísta y hoy aspirante sin partido a la gubernatura michoacana, Otro gran problema está en el tema de seguridad, pues no podemos seguir teniendo un estado tan inseguro, con barricadas y carreteras rotas, con distintos tipos de violencia en sus diversas regiones.
“Estamos dándonos un balazo en el pie con esta inseguridad que no permite que los productos de nuestro estado puedan comercializarse bien”, ante ello, especuló que, restableciendo el poder, teniendo una burocracia más ágil, dinámica y una medición permanente de las políticas públicas del estado, podremos tener éxito en nuestras tareas como gobierno.
De lo contrario seguiremos enfrentando nuestros problemas con los maestros, los normalistas, con la misma burocracia que está descontenta por la falta de pagos y de condiciones óptimas para trabajar, seguiremos siendo reactivos ante la inseguridad, y no dando este paso hacia adelante para enfrentar las cosas como se debe, en un gobierno que debe tener ante todo planeación, que es lo que ha faltado, y que ha carecido de ideas de planes y de proyectos, gobernándose más a los usos y las costumbres.